Perris Montecarlo

Absolue D´Osmanthe

Agua de perfume

El Osmanthus es un árbol originario de Asia, que crece desde el Himalaya hasta China y en concreto en la ciudad de Guilin, una de las ciudades más pintorescas de toda China. La ciudad está ubicada en el noreste de la región de Guangxi Zhuang, en la orilla occidental del hermoso río Lijiang, Li. Los alrededores de Guilin son famosos por sus "dientes de dragón", que son montañas cubiertas de bosques de osmanthus. De hecho, Guilin significa literalmente “bosque de osmanthus”, que florecen principalmente entre octubre y noviembre, embriagando todo el valle con un dulce perfume. La etimología griega de “Osmanthus” ya expresa la peculiaridad de la planta; osmé significa "perfume", mientras que anthos significa "flor".

El delicado aroma de las flores recorre un largo camino, inculcando una tierna sensación de nostalgia en los corazones de los chinos.
Fuente de inspiración poética, el osmanto también se ha convertido en leyenda. Se dice que, a lo largo de los siglos, el gigante Wu Gang trató en vano de arrebatar el hermoso "Osmanthus" cultivado en el Paraíso Lunar, tan celoso y enfurecido estaba por su fragante luminosidad floral.

Durante varios cientos de años, se ha llevado a cabo un festival en la ciudad de Hangzhou donde la gente se reunía para degustar alimentos a base de osmanthus mientras veía bailes y canciones folclóricas. Para deleite de los amantes del té, los chinos han descubierto que el osmanthus también se puede utilizar para realzar el sabor afrutado natural de algunos tés verdes o negros. En la provincia de Yunnan, desde hace más de veintitrés siglos, se perpetúa la costumbre de elaborar, durante las fiestas de otoño, un licor de flor de osmanthus que se sirve en una copa de jade.

Osmanthus, conocido desde hace 2000 años, siempre ha sido apreciado por sus flores muy fragantes, con un aroma floral afrutado que recuerda al albaricoque. Notas: flor blanca, albaricoque, fruta, cuero, esencias exóticas. El osmanto absoluto es muy caro y se utiliza en perfumería artística. La planta se importó a Japón en el siglo XVII y se introdujo en Europa en 1771.

Una fragancia sensual, sofisticada y audaz construida alrededor de la flor de Osmanthus con toques afrutados dulces. El jazmín Sambac y el sándalo refuerzan la parte intrigante y enigmática de este perfume. La base revela una firma carnal ambarina y amaderada, donde se mezclan la vainilla, el ládano y el bálsamo de Tolú.