Abate Roland

depuratio

Suplemento dietético

Normalmente nuestro organismo, una máquina perfecta, es capaz de eliminar las sustancias tóxicas producidas por los procesos fisiológicos metabólicos y digestivos así como las que introducimos con el aire que respiramos o con los fármacos que tomamos.

De hecho, las toxinas se dividen esencialmente en dos grupos:

• toxinas endógenas, producidas por procesos metabólicos normales

• toxinas exógenas, introducidas con alimentos, agua, aire y drogas

En algunas situaciones, sin embargo, nuestro cuerpo es incapaz de eliminar por completo estas sustancias tóxicas que se acumulan con el tiempo, comprometiendo el correcto funcionamiento de las células y órganos de nuestro cuerpo con importantes repercusiones negativas en nuestro estado de bienestar.

De hecho, una acumulación excesiva de toxinas a nivel orgánico puede causar numerosos trastornos, como:

• retención de líquidos

• piel impura

• celulitis

• exceso de peso

Las principales causas de la acumulación de toxinas están representadas por:

• dieta excesiva o particularmente alta en grasas que provoca una mayor producción de desechos tóxicos

• sedentarismo que incide negativamente en el tránsito intestinal y la sudoración, funciones que son la base de la eliminación de sustancias tóxicas

• insuficiencia hepática y renal: el hígado y los riñones son los principales órganos responsables de la eliminación de los desechos tóxicos

• insuficiencia circulatoria: la mayor parte de los desechos son transportados por la sangre para llegar a los órganos de purificación

Una práctica de depuración eficaz tiene como objetivo estimular simultáneamente las principales vías de eliminación y debe llevarse a cabo regularmente al menos en primavera y otoño. La depuración en primavera tiene como finalidad favorecer la eliminación de toxinas acumuladas durante el invierno, período durante el cual se lleva una vida predominantemente sedentaria y se consumen más alimentos grasos; la depuración en otoño tiene como finalidad preparar el cuerpo para reaccionar mejor al período invernal. Abbé Roland ha desarrollado productos específicos que, gracias a su composición, permiten realizar un eficaz tratamiento depurativo estimulando la funcionalidad de las principales vías de eliminación (hígado, piel, riñones, intestinos).

Composición

El líquido Depurathium contiene:

Alcachofa: con propiedades depurativas, diuréticas, digestivas y hepatoprotectoras.

Tamarindo: rico en azúcares y ácido tartárico, ejerce una acción laxante dulce sin irritar el intestino pero absorbiendo agua en él y favoreciendo así el aumento y ablandamiento de la masa fecal.

Diente de león: promueve la funcionalidad de las células del hígado y la vesícula biliar y tiene efectos diuréticos y laxantes suaves.

Ortiga: tiene una acción diurética a través de un aumento del volumen de orina, un aumento del flujo urinario y una reducción de la orina residual en la vejiga.

Hinojo: con efectos antifermentativos, también tiene un efecto beneficioso sobre el tránsito intestinal, favoreciendo así los procesos digestivos y reduciendo la formación de gases en el intestino. Achicoria: siempre se han reconocido sus propiedades diuréticas, capaces de favorecer la eliminación tanto de líquidos en exceso como de toxinas.

Viola Tricolore: capaz de promover la correcta permeabilidad de los capilares y ayudar a reducir el estancamiento de líquidos y la acumulación de toxinas.

Bardana: se le atribuyen acciones depurativas específicas sobre la piel y la sangre.

Cardo Mariano: rico en silimarina, por lo tanto tiene una eficaz acción hepatoprotectora.

Fumitoria: de acción tónica y depurativa, favorece la secreción de bilis mejorando la función digestiva y depurativa.

Abedul: con marcados efectos diuréticos capaz de estimular la función renal aumentando la cantidad de orina eliminada y con ello los desechos tóxicos.

Boldo: se utiliza por sus propiedades capaces de estimular la secreción de bilis y así mejorar la digestión.

Spirea: con efectos antiinflamatorios útiles en presencia de estancamiento de líquidos y toxinas.

Zumo de Ciruela: rico en azúcares y tiene una acción osmótica al atraer líquidos al intestino, aumentando así el peristaltismo y favoreciendo el tránsito de las heces.

Fructooligosacáridos: también llamados FOS, son fibras insolubles que no se digieren y representan un sustrato nutricional para los fermentos lácticos.